En la categoría de series de televisión acerca de políticos corruptos sobresale Boss. El todo poderoso alcalde de Chicago, Tom Kane, se enfrenta a uno de los pocos enemigos que lo pueden vencer: una rara enfermedad que amenaza con dejarlo incapacitado física y mentalmente.
Es inevitable comparar esta serie con House of Cards. Ambas son excelentes, con personajes profundos, creíbles e historias bien escritas donde la ambición, el amor y el poder se combinan para tener al espectador cautivado y al mismo tiempo horrorizado al darse cuenta de la forma en que se manejan los hilos de la política en altos niveles. En verdad que se antoja ver un cara a cara de Tom Kane con Francis Underwood. ¿Quién ganaría si estuvieran sentados en lados contrarios de una mesa donde se sirve un banquete de poder?
La desventaja de Boss es que la serie se canceló antes de llegar a su tercera temporada. Además, ya no está disponible en Netflix. Toda una pena cuando se encuentra uno con series de tan alta calidad. De cualquier forma, si tienes oportunidad de verla, no la dejes pasar. Si esta serie estuviera completa de seguro se llevaría cinco estrellas.
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